Las vacaciones estivales ya están aquí y este año te llevas a tu 'peludo' contigo. Además de su cartilla de vacunación y sus pequeños enseres, en Wonnai vamos a darte algunas recomendaciones que debes tener en cuenta antes de decidir viajar con perros en el coche.
Desde hace algunos años, viajar con la mascota en el coche se ha convertido en todo un planazo. Y es que cada vez son más los hoteles, establecimientos, playas y áreas recreativas que admiten y reciben de buen grado a todo tipo de mascotas. No obstante, antes de llegar a tu destino, conviene tener en cuenta algunos consejos para que las vacaciones con tu mejor amigo sean memorables.
Debes saber que la Dirección General de Tráfico, en lo que respecta a viajar con perros en el coche, indica: “el conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción, que garanticen su propia seguridad, la del resto de ocupantes del vehículo y la delos demás usuarios de la vía”.
En este punto, la DGT es tajante e indica que un perro no puede ir en la parte delantera del vehículo. Otro motivo por el que se desaconseja completamente llevar a nuestro perro en el asiento delantero es por su propia seguridad. Si nuestro coche monta airbag frontal, en caso de colisión podría golpearle violentamente y causarle graves lesiones.
Una recomendación similar en materia de seguridad como la que puede ser el ajuste y anclaje del sistema isofix para viajar con un bebé en un vehículo.
Además de viajar en los asientos traseros, es muy importante que tu peludo vaya sujeto con un cinturón de perros homologado que asegure tanto su protección como la tuya durante el viaje. Y que le impida a su vez -como indica la DGT-, que acceda ala zona de conducción. El cinturón de sujeción también permitirá a tu mascota una cierta libertad de movimiento, ya que podrá sentarse. Y por supuesto, tumbarse y dormir a pata suelta durante todo el trayecto.
Salvo que tu perro esté acostumbrado a viajar contigo en coche con el cinturón de sujeción, quizás el transportín sea la forma más recomendable (y segura) para hacer largos recorridos.
Todo dependerá de las dimensiones de tu mascota. Si es pequeña podrás ubicar el transportín en el suelo del vehículo. Preferiblemente en la parte trasera del coche; ya sea junto a los asientos, o bien en el maletero. Y si tu perro es un“perrazo”, lo más conveniente es colocar el transportín en la zona de maletero, siempre en posición transversal respecto a la dirección de la marcha.
Sobre todo, si vas a hacer un viaje largo. Esto evitará, si tu 'peludo' se marea, que se produzcan vómitos o defecaciones dentro del vehículo. También el estrés lógico aparejado a la situación. Si tu perro es de los que siempre se marean al viajar en coche, es conveniente pasar antes por el veterinario para que le recete alguna pastilla o algún relajante natural.
Hacer pausas de conducción es bueno para ti y también para tu mascota. A ti te servirá para aliviar la fatiga visual, estirar las piernas o reponer fuerzas después de ir al baño. Parar cada dos horas también permitirá a tu perro pasear, hidratarse, hacer sus necesidades o jugar contigo (o con otros viajeros peludos) antes de retomar el viaje.
Habida cuenta de que solemos tomarnos las vacaciones en verano, tu perro podría sufrir un golpe de calor si lo olvidas dentro del vehículo. Las posibilidades de que esto ocurra son altísimas y, además, unos pocos minutos podrían ser letales.
Según la nueva Ley de Tráfico, que entró en vigor el pasado 21 de marzo, las multas por“saltarte” las normas al viajar con tu perro en el coche oscilan entre los 80€-si no va correctamente sujeto-, y los 500€ si el animal invade el espacio del conductor o va suelto en su regazo. Recuerda que, además de llevar en la guantera la documentación necesaria para circular correctamente, este tipo de infracciones con tu mascota pueden incurrir en multas que pueden suponer la retirada de seis puntos del carnet de conducir.
Si vas a viajar con tu perro en coche, aprovecha todos estos consejos y planifica todos los detalles del viaje para que la escapada salga a pedir de boca. Y sobretodo ¡desconecta y sé feliz!